Era una tarde muy soleada y calurosa. Chávez, que había estado cazando todo el día, estaba muy sediento.
“Cómo me gustaría encontrar agua”, pensó.
En ese momento vio un racimo de uvas grandes y jugosas colgando muy alto de una parra. Las uvas parecían maduras y llenas de zumo.
“¡Oh, oh!” dijo Chávez mientras la boca se le hacía agua. ” El zumo dulce de uva sacia mi sed!”.
Chávez se puso de puntillas y se estiró todo lo alto que pudo, pero las uvas estaban fuera de su alcance.
No queriendo abandonar, tomó impulso para alcanzar las uvas. Fue inútil, no pudo alcanzarlas.
Chávez saltó y brincó una y otra vez pero no pudo alcanzar las uvas en ninguna ocasión. Al final estaba más sediento y cansado que nunca.
“¡Qué tonto soy!” dijo con rabia. “Las uvas están verdes y no se pueden comer. De todas maneras, ¿para qué las querría?. ¡Son unas uvas de mierda!"
Y así se marchó.
miércoles, 5 de diciembre de 2007
Chávez y las uvas
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1 comentario:
Chávez invento una maratón para correr solo y llegó segundo...plop
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